DURO DE MATAR

¿Sientes que tu mundo se viene abajo?  ¿Qué te persiguen? ¿Hasta aquí llegas?...déjame decirte que tu cabeza tiene un precio,  ¡te buscan! en el infierno tiene un alto valor y harán todo lo posible por conseguirla, miles se levantan en tu contra y buscan una recompensa por ello. ¡Pero! Hay una buena noticia… el triple de lo que se levantó en tu contra se levantan a favor, es que en el cielo ya se pagó a precio de sangre, no solo tu cabeza, todo tu, incluyendo tu alma, le perteneces a Dios si así lo decides creer y le aceptas, gracias a lo que Jesucristo hizo por ti. Morir para que vivieras.

Pero el enemigo es inquieto y voraz, quiere verte caído, derrotado y quiere introducir ideas en tu mente; “no sirves”, “no vales nada”, “eres basura” “que desperdicio”, “no vale vivir”, cosas como esta pudieran pasar o lo han hecho por tu cabeza, es el maligno queriendo echar tu hermoso propósito en Dios atrás.

 Es tan atroz y despiadado que quiere verte autodestruyéndote con drogas, alcohol, suicidio o una vida fuera de control. La soledad no te pertenece. Dios siempre estará contigo. Aunque veas que todo está en tu contra y la presión no parece terminar, debes ser fuerte, eres duro de matar, no serás derrotado ni aniquilado porque tienes un potencial muy fuerte dentro de ti que viene de las alturas. Es probable que te veas herido y con pocas fuerzas, pero eres la estrella de la película, en la portada te ves casi destruido, pero todos sabemos que el protagonista es el que más golpes lleva, pero a la final sobrevivirá y nos dejara ansiosos de una segunda parte y ver como derrotará de nuevo a sus enemigos.

Estás en la portada del estreno mundial, pareciera todo acabar, te ves herido, hasta sangras, pero no es así, es el fin del nuevo comienzo y la presión solo hará sacar lo mejor de ti. Recuerda: “Un diamante solo fue un trozo de carbón que resistió una presión EXTRAORDINARIA” Nadie dijo que sería fácil, pero tienes la fuerza de Jesucristo en ti, y tú me dirás: pero él fue crucificado… ¡correcto! Pero a Él no se le dio poder para escapar de la cruz sino para enfrentarla y soportarla, más que eso, resucitó y vive en medio nuestro. No se te dio fuerza para huir. ¡No huyas! Tienes la fuerza para enfrentar con valentía y FE lo que tienes delante de ti. Debes creerlo, levantarte en el nombre del Señor Jesucristo y te aseguro que la victoria será tuya.

Eres el protagonista, pero Dios es el director de la película y te aseguro que Él no va a permitir que su valorada estrella muera en la película ni sea derrotado.

 Esfuérzate por dar de que hablar en los cielos y ser temido en el infierno. Ya dejas de defenderte y empiezas atacar…eres un duro de matar.

Dios contigo, ¿quién en contra? Romanos 8:31

Miguel Gutiérrez